miércoles, 21 de junio de 2017

El Combate Espiritual

En la reunión de junio del CLC hemos comentado este utilísimo libro que nos ayuda en nuestra diaria lucha por agradar a Dios: El Combate Espiritual, del sacerdote religioso del siglo XVI, Lorenzo Scupoli. 

Son 59 capítulos llenos de sabiduría. Un libro que todo cristiano debe tener de cabecera y recurrir a él constantemente; como lo hiciera San Francisco de Sales, quien por más de 19 años llevó consigo, lo leyó y lo recomendó a quienes dirigía.

Compartimos, a continuación, el índice del libro, con la intención de que te animes a leerlo y a releerlo cuantas veces sean necesarias:

ÍNDICE
Prólogo Los elogios que hizo un gran santo acerca de este libro. 
Capítulo 1 "Ningún atleta recibe la medalla de campeón, si no ha competido según el reglamento".
Capítulo 2 La desconfianza que se ha de tener en sí mismo. 
Capítulo 3 La confianza en Dios. 
Capítulo 4 Cómo podemos conocer si obramos con desconfianza en nosotros mismos y con confianza en Dios. 
Capítulo 5 El error de algunas personas que confunden el miedo y el pesimismo con una cualidad o virtud. 
Capítulo 6 Avisos importantes para adquirir la desconfianza en sí mismo y la confianza en Dios.
Capítulo 7 Cómo hacer buen uso de las dos potencias que hemos recibido: el entendimiento y la voluntad. 
Capítulo 8 Las causas que nos impiden juzgar y calificar debidamente las situaciones y la regla que se debe observar para conocerlas bien. 
Capítulo 9 Otro vicio del cual debemos librar al entendimiento para que pueda conocer y juzgar bien lo que es útil. 
Capítulo 10 Cómo ejercitar la voluntad. El fin por el cual debemos hacer todas las cosas. 
 Capítulo 11 Algunas cosas en las cuales hay que pensar para mover la voluntad a buscar, en todas las cosas, agradar a Dios. 
Capítulo 12 Las fuerzas que se hacen la guerra, unas a otras, dentro de nosotros. 
Capítulo 13 Cómo combatir la sensualidad, y qué actos debe hacer la voluntad para adquirir la buena costumbre de obrar bien.
Capítulo 14 Lo que conviene hacer cuando nuestra voluntad parece vencida y derrotada por las pasiones y malos instintos. 
Capítulo 15 Algunos avisos importantes acerca de cómo se debe presentar el combate espiritual. Contra que enemigos hay que combatir, con qué medios pueden ser vencidos. 
Capítulo 16 Del modo como los combatientes de Cristo debemos planear los combates cada mañana.
Capítulo 17 De qué manera deben reprimirse los movimientos repentinos de las pasiones. 
Capítulo 18 Modos muy importantes para combatir contra el vicio impuro. 
Capítulo 19 Otros métodos eficaces para evitar caer en la impureza.
Capítulo 20 El modo de combatir contra el vicio de la pereza. 
Capítulo 21 Cómo debemos gobernar nuestros sentidos y servirnos de ellos para contemplar las realidades divinas. 
Capítulo 22 Cómo podemos valemos de los seres visibles para elevar nuestro corazón a Dios. 
Capítulo 23 Del modo de gobernar la lengua. 
Capítulo 24 Cómo huir de la inquietud y evitar las preocupaciones del corazón. 
Capítulo 25 Lo que debemos hacer cuando sufrimos alguna derrota en el combate espiritual. 
Capítulo 26 Las cuatro clases de actuaciones equivocadas que existen en las personas respecto al pecado. 
Capítulo 27 La segunda actuación equivocada. No empezar con seriedad a tratar de librarse de la esclavitud del pecado. 
Capítulo 28 La tercera actuación equivocada: imaginarse que ya se está cerca de la santidad, cuando se está enormemente lejos de ella. 
Capítulo 29 La última y más peligrosa actuación respecto al pecado: dejar de combatir, y caer en la ruina espiritual. 
Capítulo 30 Una trampa mortal que hay que evitar: el que las mismas virtudes sean causa de que nos dejemos vencer por el orgullo. 
Capítulo 31 Pequeños combates que hay que hacer todos los días. 
Capítulo 32 Hay que contentarse con adquirir poco a poco las virtudes y ejercitarse primero en una virtud y después en otra. 
Capítulo 33 Para lograr conseguir una virtud es necesario amarla y estimarla mucho.
Capítulo 34 Que en el combate espiritual, no adelantar es retroceder, y no crecer es disminuir. 
Capítulo 35 Hay que exponerse al combate para adquirir valentía, agilidad y fuerza de voluntad. 
Capítulo 36 Que para aprender a triunfar hay que aceptar las ocasiones que se presentan para combatir y no disgustarse por aquello que va contra nuestras inclinaciones. 
Capítulo 37 Aprovechar toda ocasión para crecer en toda virtud. 
Capítulo 38 Que es necesario hacer un plan de vida. Tratar de cumplirlo cada día y no imaginar jamás que ya lo estamos cumpliendo exactamente. 
Capítulo 39 Que quien desea obtener victorias en el combate espiritual tiene que aceptar recibir heridas, sufrir dolores, tener caídas y padecer desilusiones. 
Capítulo 40 Que es necesario evitar las exageraciones, porque éstas traen más mal que bien. 
Capítulo 41 El peligro de vivir juzgando y condenando a los demás. 
Capítulo 42 El arma más poderosa para vencer en el combate espiritual. 
Capítulo 43 Las dos clases de oración y cómo hacerlas. 
Capítulo 44 Cómo orar por medio de la meditación. 
Capítulo 45 Cómo podemos meditar acerca de la Santísima Virgen. 
Capítulo 46 Meditemos en una devoción que nos hace mucho bien: la devoción a san José. 
Capítulo 47 Algunos sentimientos afectuosos que podemos sacar de la meditación en la Pasión de Jesucristo. 
Capítulo 48 Los frutos que podemos obtener de la meditación en la cruz y en las virtudes de Jesucristo. 
Capítulo 49 Detalles acerca del sacramento de la Eucaristía. 
Capítulo 50 Método práctico de prepararnos a la Sagrada Comunión para que podamos progresar en el amor a Dios. 
Capítulo 51 Del modo de dar gracias después de la comunión. 
Capítulo 52 La comunión espiritual. 
Capítulo 53 Cómo ofrecernos del todo a Dios. 
Capítulo 54 Qué hacer cuando llegan las sequedades espirituales. 
Capítulo 55 ¿Y si llegan las tentaciones? 
Capítulo 56 La importancia del examen de conciencia. 
Capítulo 57 Cómo en este combate espiritual debemos perseverar hasta la muerte. 
Capítulo 58 El último combate. El que nos espera a la hora de la muerte 
Capítulo 59 Las cuatro tentaciones de la hora de la muerte. 

Es maravilloso contar con esta lectura, que aunque el libro haya sido escrito hace más de cuatro siglos, sigue muy vigente y es herramienta necesaria para aprender de la experiencia del autor, así como de los santos y en especial de Cristo, cómo luchar en nuestro combate espiritual.

Te lo recomiendo. Léelo con tranquilidad, saboréalo y disfruta la sabiduría haciéndola vida.